sábado, 6 de julio de 2013

A los 20..



Han sido unos meses difíciles temí no regresar a este lugar que a sido testigo de confesiones profundas, de sueños, de amores, de letras que poco a poco se han ganado un lugar irreemplazable en mi vida, como todo aquello que llega a nuestra existencia para instalarse y que al no estar se extraña, se anhela, se busca, se ata a la vida misma. Es imposible  tratar retroceder algunos kilómetros cuando sabes con plena certeza que todo a tenido su tiempo, y que como todo en esta vida algunas  cosas caducan, mientras que otras por su parte permanecen o renacen entre el polvo, entre las cenizas como el ave fénix.

A lo mejor, es que a mi edad siento que e vivido mucho, que e tenido que nacer y morir muchas veces, ascender y descender la montaña de la vida con mas frecuencia de lo normal, así que llegas aprender algunas lecciones valiosas. Entre ellas que renunciar y dejar ir también hace parte del amor, que el amor de verdad duele, que es un conquista diaria y que el secreto del mismo esta en morir a nuestro ser para donarnos al otro,  que se puede disfrutar y compartir con el otro los silencios que en ocasiones dicen mas que mil palabras, que muchas palabras no dicen nada y que una acción lo cambia todo, que todo puede ser mucho, que a  veces basta con lo poco para ser felices, que ser feliz no es un acto magia es una decisión,  que las decisiones son semejantes a teoría del efecto mariposa , alguna mínima acción o decisión  puede generar el caos si esta no se toma con precaución, que las precauciones nos salvan del riesgo, pero que el riesgo se vale cuando es por una causa justa y sincera, que la sinceridad y la comunicación es la base de toda buena amistad,  que la amistad debe cultivarse todos los días,  que todos los días son una buena oportunidad para decir te quiero, que un te quiero no es suficiente cuando se ama, y que si se ama se entrega todo hasta la vida, que la vida solo se goza una vez, que lo gozado debe a ver sido sufrido, y lo sufrido nos ayuda  a madurar, que madurar no es cuestión de años es de golpes aprendidos, que aprender no te hace menos que el que sabe,  que el que sabe deber ser toda la vida un buen aprendiz,  que el aprendiz debe esforzarse si algún día quiere ser maestro, que ser maestro es una vocación, que la vocación genera dudas, que la dudas   siempre traen respuestas,  que las respuestas las trae el tiempo, que el tiempo es una medida, que las medidas no nos definen, que definirse lleva años, que los años pasan con afán, que el afán nos quita la paz,  que la paz se consigue reconciliándose consigo mismo y con los otros, que los otros son mi prójimo, y que mi prójimo es Dios y  que Dios lo es todo…Creo que a los 20 años se llega aprender algunas cosas importantes.
 

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Gracias por inmortalizar sus letras en este lugar